Aprovechando que todos los soles estaban en sus aulas de referencia, Fran y yo hemos aprovechado para trabajar durante una sesión la sensorialidad táctil y olfativa, de forma que así pueda ir observando los cambios que se han producido durante este verano en este campo.
Hemos trabajado diferentes tactos (arena mojada kinesia, bolitas pegajosas y lentejas), al principio no nos hacía mucha gracia tocar ciertas texturas, pero poco a poco hemos ido tolerando, incluso disfrutando las diferentes texturas presentadas.
La parte del olfato nos ha costado mucho más, así que seguiremos trabajando la integración sensorial olfativa. Hemos presentado diferentes olores (especias, frutas, ambientadores, etc.) y en diferentes intensidades, pero no nos han gustado NADA. Podríamos estar hablando de hipersensorialidad olfativa???? Todavía es pronto, además, como ya hemos comentado en entradas anteriores, la sensorialidad es cíclica, así que puede ser que mañana toleremos muchos olores, por lo tanto, seguiremos trabajando, observando y anotando para poder realizar un plan de intervención lo más ajustado e individualizado posible con cada uno de los soletes.
Además, como siempre, hemos trabajado otros objetivos de forma transversal: las tentativas de comunicación, vocabulario, atención conjunta y habilidades de autonomía (después hemos aprovechado para lavarnos las manos) mediante el encadenamiento hacia atrás, Fran ya es capaz de lavarse las manos (jabón, agua, secar) casi sin ayuda verbal.
Muy bien campeón!!!!!
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